Mi Historia

Mi Historia Y Cómo Comenzó Todo

Que Xopa! mi gente, mi nombre es Joel Ferrán y actualmente tengo 31 años. Soy mas panameño que la cutarra, graduado de Ingeniería Civil en la UTP en Panamá, y con una Maestría en Arquitectura y Planeamiento Sostenible en HCU Hamburgo, Alemania.

El origen

Desde niño, siempre tuve una gran pasión por los aviones. Todavía recuerdo como si fuese ayer, cuando iba al aeropuerto  de Tocúmen con mi padre, para solo ver los aviones aterrizar, y luego ir por un buen Mc’Donalds! Desde ese entonces decía, wao qué se sentirá estar en un avión? Hasta que muchos años después, llegó ese famoso día. A los 11 años de edad, realicé con mi familia mi primer viaje a Estados Unidos; no se borra de mi memoria ese día, que por primera vez me subí a un avión, en ese preciso momento me dije: “Xiuuuux yo quiero hacer esta vaina toda mi vida.”

Desde este sentimiento, nace mi sueño de estudiar aviación, pero que por circunstancias de la vida, pues no se dieron. Empecé mi carrera de Ingeniería Civil en el 2007, y no fue hasta el 2014 que pude realizar mi primer viaje a Costa Rica por mi propia cuenta, junto a un amigo. A partir de este viaje, lo único que he hecho, es coleccionar momentos inolvidables alrededor del mundo. 

       “Coleccionar momentos inolvidables alrededor del mundo”

Guanacaste, Costa Rica, 2014

Un cambio radical

 En 2015, tomé la decisión de que mi vida necesitaba un cambio, explorar nuevos horizontes y asumir nuevos retos. Apliqué para realizar mis estudios en Alemania, en distintas universidades, era uno de los países que más me llamaba la atención. En Septiembre del 2015, recibí la noticia de que había sido aceptado en la HCU en Hamburgo. Yo no sé si fue una carambola o no, porque digamos que no era el “pelao” con notas altas en la universidad, pero me dije: ” Bueno papá, nos juimos!! “. Aunque era un gran deseo, no fue muy fácil tomar esta decisión, pues tenía que dejar mi trabajo, mi familia y amigos. Pero bueno esa es otra historia. 

Hamburgo

 Al día de hoy, sigo viviendo en Hamburgo, esta ciudad única, se ha convertido en mi segundo hogar. Claramente, no ha sido un camino fácil mantenerme y llegar al punto en el que me encuentro hoy en día. He tenido, altos y bajos, pero como dice mi viejo: “Hay que tirar guante hasta donde uno aguante!”

Una vez en Alemania, ese deseo por viajar, se multiplicó por mil. El hecho de estudiar en un programa internacional, me brindó la oportunidad de hacer nuevas amistades de distintas partes del mundo, lo cual a su vez, me abrió las puertas en muchos países, para poder visitarlos, algo al cual estaré agradecido POR SIEMPRE. También es un hecho muy obvio, que viajar en Europa, es facilísimo y mil veces más económico que en América. Recuerdo cuando pagué 6 Euros ( approx 7 dólares ) por un pasaje ida y vuelta a Bélgica jajaja, lo que me valen dos six -packs de “pintas”, dije pucha 6 euros, este avión ojalá y llegue, pero bueno toca jugársela ! “De la mano de Dios me la voy a rifar” como dijo un célebre “filósofo” en mi país.

 

El camino en Hamburgo

Como mencioné en otro texto, no todo es color de rosas. Para realizar estos viajes, por muy baratos que sean, hay que gastar. Obviamente, me tocó buscar la manera de costear mi vida aquí y seguir viajando cuando pudiera, hasta que llegara el momento de decir, no puedo más, ya me toca regresar a Panamá. 

Bueno, el mundo da muchas vueltas, primero trabajé en un crucero cargando maletas, y posteriormente, lo que era en una pequeña fuente de ingreso para costear mis gastos, se convirtió en mi primer trabajo oficial, nada mas ni nada menos que en ALEMANIA…… en una pizzeria como cocinero. Así es, como cocinero, me preguntaba y me preguntaban; Ingeniero Civil? con una maestría trabajando en un restaurante? “Man qué haces allá?  Regrésate a trabajar de verdad” una vez recuerdo que me dijeron eso. Pues, definitivamente acá es otra mentalidad. Esta nueva experiencia me ayudó a crecer mucho como persona y madurar un montón, me ayudó a ser consecuente y pensar las cosas con más cautela. Por otra parte, resaltar los resultados que obtuve al estar en este nuevo trabajo, hice nuevos amigos, adquirí nuevas experiencias, como por ejemplo; manejar cantidades de comidas para el día a día, manejo de personal, organizar horarios, y PIZZA GRATIS 🍕 . Algo me decía que no estaba listo para regresar a Panamá, quería seguir viviendo este nuevo reto. Lo bueno es que mantenía mi estatus como estudiante, lo que me daba el derecho a trabajar “part time” y consecuentemente tener horas disponibles para viajar. Paralelamente, iba acumulando horas de trabajo y experiencia, eso sí, con mucha responsabilidad y honestidad, lo que hizo que me ganara la confianza de mis jefes, por ende me daban más horas de trabajo, resultando en: MÁS DINERO. De igual manera, tengo que resaltar, que para poder viajar tenía que sacrificar muchas cosas, ya que el salario no daba para tanto, como por ejemplo; compraba lo necesario en el supermercado (literalmente lo necesario 😂), aunque me encanta la fiesta, siempre trataba de manejar al máximo mi presupuesto cuando salía, no gastaba dinero en ropa o cosas similares, y así sucesivamente, en otras palabras: SÍ ,era bien “duro”,  bien “codo” y lo sigo siendo jeje.

 

 Obviamente llegó un punto de mi vida donde dije, bueno, es hora de buscar una estabilidad. Mas sin embargo, llegar a este punto no fue fácil. Pasé mucho trabajo, pero hice todo lo posible para poder quedarme en Hamburgo, desde pedir dinero prestado, cosa que siempre me enseñaron en casa a no hacer, hasta doblar turnos en la pizzeria, viví en 4 apartamentos distintos en menos de 6 meses, trabajaba en un restaurante y el clima no ayudaba en lo absoluto. Psicológicamente todo esto pesaba, pero sabía que si decidía regresarme a Panama, no había vuelta atrás, y yo aún no estaba listo para eso. Recibía el apoyo de mis amigos y mi familia; luché y luché hasta que conseguí mi segundo trabajo en en gerencia de proyectos en tecnologías sostenibles y ser parte también del equipo de marketing de una destilería de gin, vodka y whiskey. Paralelamente, conseguí un apartamento compartido, que es donde vivo actualmente. SÍ, todo ocurrió  en un solo mes, en pleno Febrero y en pleno invierno. Cuando piensas que nada te puede salir bien, BOOM! todo cambió, y aquí estoy señores vivito y coleando con ganas de más.

Pero bueno mucho bla bla, ahora te dejo mi siguiente sección, y ahí podré contarte, cómo lo hacía para poder viajar sin dejar de trabajar.

Si deseas saber más sobre cómo venirte a Alemania a estudiar, escríbeme a ver si tomo la decisión de hacer una nueva sección, y explicarte como hacer para poder estudiar en Alemania.

Primera foto en Hamburg- estación de trenes, así bien turista

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